martes, 23 de junio de 2015

Ruta de senderismo: El río de San Antón

El río de San Antón es un curso de agua que nace en las parameras de Masa y va buscando su camino hasta el cañón del Rudrón. En su transitar va formando un bonito y poco conocido valle que nos permite realizar una interesante y fácil ruta.
Dificultad: Fácil, salvo por una distancia relativamente larga
Orientación (sin GPS con track o cartografía): En general fácil pero hay algunos puntos complejos.
Belleza: Normal
Tiempo y distancia: 5 horas y media (18,5 kilómetros)
 
 
Situación
El punto de partida de esta ruta es el pueblo de Terradillos de Sedano. Para llegar a este pueblo hemos de tomar la nacional N-623 durante 35 kilómetros hasta el cruce de Masa, aquí giramos hacia la izquierda. En apenas un kilómetro alcanzamos el carreteril que nos conduce a Nidágula y Terradillos. Los últimos kilómetros transcurren por un serpenteante y sombreado vallejuelo. En el pueblo seguimos la calle principal hasta el final, en las proximidades de una casa rural.
 
Puntos de interés
 
Pueblos de Terradillos de Sedano y Tablada del Rudrón. Vistas del desfiladero y de las cumbres de la zona. Tramo de remonte del río.
 
Descripción de la ruta
 
Merece la pena dedicar unos minutos al principio o al final de la ruta a recorrer las calles de este cuidado pueblo en donde la piedra de páramo es el material predominante de la construcción. Llama especialmente la atención la conservación en la parte alta de algunas casas de las antiguas “hornillas”; troncos huecos tapados e insertados en los muros, destinados a su utilización como colmenas.
 
Justo en el punto donde termina el cemento empezamos a caminar por un camino bastante ancho, sin cambiar de dirección. A nuestra espalda va quedando el pueblo y la Peña Itero, que forma parte de la esencia tradicional de la población. Pronto llegamos al antiguo cementerio, en el que parece haberse reutilizado una antigua ermita de rasgos románicos. Bordeamos el lugar dejándolo a nuestra derecha e identificamos claramente un sendero que asciende decididamente por la ladera.
 
Comienza aquí un prolongado y relativamente duro tramo de ascenso, aunque la subida se hace más llevadera con la contemplación del cada vez más marcado valle. Poco a poco vamos ganando altura por una canal secundaria hasta llegar a la paramera. Con cierta tendencia hacia nuestra derecha enlazamos con un camino carretero que tomamos igualmente hacia la derecha el cual desemboca en una amplia pista; que esta vez seguimos hacia la izquierda.
 
Entramos de esta manera en un tramo algo monótono por lo alto del páramo y sin relieves que nos llamen la atención. Cuando estamos a punto de entrar en un pinar de repoblación llegamos a un cruce, en el que seguimos hacia la izquierda por un camino mucho menos definido.
 
Con esta maniobra alcanzamos pronto el borde superior del valle, que a estas alturas se ha convertido en un amplio cañón. El arbolado, en el que los quejigos dominan claramente, cada vez es más espeso. El nuevo camino se pone paralelo al cañón, ofreciéndonos de vez en cuando nuevas panorámicas.
 
Seguiremos esta trayectoria más de tres kilómetros. Al final del mismo llegamos a un espigón rocoso conocido como Peña Palomera. Desde aquí podemos observar el final del cañón del río de San Antón en su conexión con el cañón del Rudrón. Bajo nosotros observamos el pueblo de Santa Coloma del Rudrón y muy cerca el de Moradillo del Castillo. Más a lo lejos son claramente identificables las peñas de Ulaña y Amaya, así como las principales cumbres de la Montaña Palentina.
 
Retrocedemos unos 700 metros y miramos atentos al lado derecho del camino. Con un poco de atención observamos un hito montañero. Desde aquí nace un sendero prácticamente inapreciable en el principio, pero al poco se hace más evidente descendiendo en dirección noroeste. Bajamos rápidamente por el bonito sendero a lo largo de aproximadamente un kilómetro. Aquí el sendero se difumina pero andando un poco hacia la izquierda enlazamos con otro que nos conduce sin mayores problemas hasta Santa Coloma.
 
Entrando al pueblo encontramos un bonito puente medieval, muy cerca de la confluencia del humilde río de San Antón con el río Rudrón. Unos pasos más adelante cruzamos el primero de los ríos a la vista del segundo. El nuevo camino conduce al centro de Santa Coloma, aunque en este punto y a la altura de una pequeña capilla nace el camino que nos llevará de regreso a Terradillos.
 
En todo caso merece la pena dedicar unos minutos a visitar el bonito casco urbano de este pueblo además de las dos presas (correspondientes a dos antiguos molinos) que se encuentran respectivamente unas docenas de metros río arriba y debajo del pueblo.
Tras la visita al pueblo tomamos el camino indicado para continuar. Al instante llegamos a una bifurcación  en la que seguimos hacia la izquierda. Pronto cruzamos el río de San Antón (si tiene mucho cauce hay una pasarela peatonal que permite superarlo).
 
Caminamos por un ancho camino (lo cual mitiga un poco el efecto del bello paisaje) mientras observamos las laderas cubiertas de arbolado y coronadas con algunos farallones rocosos. Vamos remontando el largo valle con bastante facilidad. A medida que vamos avanzando se va suavizando el paisaje y reduciéndose el arbolado, incluso aparecen algunos campos de cultivo.
 
Pasados unos cinco kilómetros llegamos a un cruce en el que aparecen unas señales de sendero de pequeño recorrido. Decidimos desviarnos hacia la derecha y  cruzamos el río. A partir de aquí caminaremos por el otro lado del río. El nuevo camino es más rústico que el anterior y permite ganar algo de terreno. Al cabo de kilómetro y medio los dos caminos vuelven a enlazarse.
 
Tras pasar junto a una fuente y un molino llegamos a una nueva bifurcación en la que seguimos de frente. Dejamos al lado una segunda fuente y sin mayores novedades llegamos a Terradillos.
 
Comentarios
 
Recorrido sencillo y con desniveles suaves; en el que la complicación viene dada tal vez en la localización del cruce de la parte superior y si acaso en una distancia un tanto larga. En la última parte nuestra caminar coincide con el trazado del sendero de pequeño recorrido PRC-BU-4.
 
En el momento de realizar la ruta (mayo de 2015) se encontraba en proyecto la señalización de un sendero por este desfiladero, dentro de la red del Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón. Por las pistas de que disponemos se parecerá bastante al recorrido descrito aquí.
 
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Track del recorrido (pulsa en el círculo verde para ampliar)





Vídeo con imágenes del recorrido.

4 comentarios:

Luis Miguel Avendaño dijo...

Felicidades por este blog tan intersante sobre senderismo. Soy un burgales que reside en Sabadell y también organizo mensualmente una salida de montaña, estamos realizando varios GR en esta zona. Esta actividad resulta apasionante para conocer los paisajes desde los senderos. Con la información de este blog, tal vez pueda hacer alguna ruta. Muchas gracias por esta aportación generosa y detallada.
Luis Miguel Avendaño

Montacedo dijo...

Gracias por tus palabras. Si al final te animas puedes preguntar dudas si te surgen, con tal de que lo hagas con un poco de antelación. Un saludo. Javier (montacedo).

Angel dijo...

El fondo del desfiladero lo he recorrido varias veces, sobre todo en bicicleta. La opción que muestras por el borde del páramo se presenta interesante y a buen seguro la realizaré porque debe presentar buenas panorámicas del desfiladero. Un saludo.

Montacedo dijo...

Sí. está bastante bien. A ver si terminan de preparar y señalizar los senderos de una vez. En enero me dijeron que era cosa de dos o tres meses; y así seguimos.